Cómo establecer y cumplir tus límites

Cómo establecer y cumplir tus límites

En la vida, con mucha frecuencia tenemos que establecer límites. A diario tienes que debatir sobre los límites de cuánto debes comer, cuánto pagar un producto, o bien, qué tareas específicas debes cumplir, a qué horas te vas a dormir, entre muchos más. Los límites ayudan a definir nuestro día a día. 

Sin límites, sin unas pautas definidas sobre tu día a día, no podrías enfocarte. Quizá lo más importante del proceso de establecer los límites, se encuentra en el aprender a decir NO. Sí, cuando logras definir tu propio criterio y respetar tu NO, entiendes que piensas en ti y trabajas para ti. 

Esta entrada trata sobre esos aspectos en los que debes ser valiente para tener un orden mayor en tu vida cotidiana. Así, reflexionarás a fondo sobre cómo distribuir tu tiempo, cómo asumir tus responsabilidades diarias y cómo sentirte pleno con lo que realizas día a día. 

La importancia del horario 

Los horarios de trabajo deben respetarse para que la vida no se nos salga de las manos. Si eres de los que no crea un horario de trabajo, al final vas a terminar hasta 10 0 12 horas al día, tratando de suplir los espacios generados a lo largo del día en el procrastinar.

Si decides empezar a trabajar a las 8:00 a.m. entonces enfoca tu mente para iniciar tu periodo de trabajo a esa hora, siendo consciente que podrías terminar a una hora máxima de 17:00 p.m. El resto del tiempo es para ti, para disfrutar de tu familia, para sentirte tranquilo, para repostar tus energías. 

Las llamadas 

¿Recibes muchas llamadas por semana? ¿Tienes que llamar a tus clientes con frecuencia? ¿Necesitas informarte de cómo están tus gestiones? Un excelente consejo a seguir se encuentra en elegir un único día a la semana para despejar esta responsabilidad. Es igual a quien coordina las reuniones de trabajo.

La idea es que puedas tener un control de tu agenda, para enfocarte en esta actividad en concreto. Así, tendrás una visión más exacta de cómo avanzan tus metas. El orden es el otro sinónimo derivado de limitarse y enfocarse. 

Aceptar qué actividades no quieres hacer 

Sí, no siempre estamos de ánimo para realizar actividades o tareas que no nos gusta realizar. De hecho, esa tristeza y desgano involuntario que aparece puede convertirse en un fenómeno que mine tu estilo de vida. ¿Qué se puede hacer entonces? Aprender a delegar esas responsabilidades en otra persona

No te gusta llevar a tus hijos a su entrenamiento de fútbol, no te gusta salir a realizar las compras del mercado, no te llama la atención hacerse cargo de la contabilidad de tu empresa. Entonces no te esfuerces y dile no a dichas actividades. Deja que otra persona con mejor disposición anímica decida hacerlo. 

Separar tu número telefónico personal de tu número telefónico empresarial 

Esto es algo fundamental para no atentar con tu tranquilidad y tu vida profesional. Una cosa es lo que ocurre en el escenario de tu trabajo y otra muy distinta lo que acontece en tu vida personal. Igual que otras personas, cuando acaba tu horario laboral, tienes que cambiar de piel y enfocarte en ti.

Lo mismo ocurre para cuando llega el fin de semana. Por eso, para que no te llamen un domingo en la mañana para que te vendan un producto o realices una tarea específica, se lo más reservado con tu número telefónico personal. Tus clientes pueden esperar. Aprende a respetar tu tiempo, diciendo NO a quienes desean conocer tu número telefónico personal. 

Decir no a trabajar con amigos con descuentos en tus productos

Por otra parte, este fenómeno sobre los descuentos y los privilegios que tienen los familiares sobre tu empresa es muy común. Las amistades y los familiares siempre considerarán que pueden abusar de tu carisma para beneficiarse de tu trabajo. Y eso es algo que debes aprender a distinguir, a limitar.

Los negocios son negocios, la amistad es la amistad. No permitas que ese abuso discreto, haga impacto en tus finanzas. Tú tienes una responsabilidad contigo mismo y eso es algo que ellos no van a asumir. Que tus ventas no se vean afectadas por la coacción de mantener viva la armonía entre familiares y amigos. 

Sobre el tema de la amistad y la familia de hecho, hay mucho que decir en lo referente a decir NO y establecer límites. Hay un punto en tu vida profesional en que aprendes a reconocer a profundidad que no debes mezclar tus emociones con tu trabajo. Porque de hacerlo, expones tu fragilidad. 

Y esta fragilidad a su vez se convierte en un punto débil para que los demás te manipulen. Es ahí donde estableces la diferencia de que trabajo es trabajo, y vida personal es vida personal.